yo
vi fresas de la amargura
y
a pier paolo passolini en “el evangelio según san mateo”
y
policías que corrían tras el matrero todas las cintas
y
películas varias que no integran el programa de raimondi
los
lunes
franceses,
y
filmes
sobre el desamparo y el mismo desamparo -no era un personaje-, en el
cine
de
sarandí grande, y en el roma
y
cantantes melódicos y
crónicas
y
el diario el plata y bp color y la tribuna
y
el cine arte del salvo,
y
a león lev entrar y ver una de tarkovski y cine de georgia años
después
y
vi a políticos de izquierda hablar de acumulación de fuerzas
y
a ti cambiarte de camiseta debajo de una llovizna de esas que
justifican la literatura,
crónicas
acerca
de las fresas de la amargura,
y
leí en periódicos de izquierda agudas crónicas acerca de las
fresas
y
vi
a josé emilio pacheco hablar acerca de
los
terremotos
y
a malí contarme de las carreteras mejicanas y de los peajes y de las
otras carreteras
sin
peajes ni primer mundo ni mtv por donde
viajan
los pobres a
san
diego
vi
cantantes melódicos marchosos en san diego
y
el estadio de toluca donde uruguay perdió en 1970 con brasil 4-2
y
una noche a osvaldo soriano contar sus propios recuerdos construir
con ellos historias de
desamparo
crónicas
y
muchas cosas más, entre ellas las piernas de una mujer hermosa que
empalidecieron
obnubilaron boicotearon todo lo demás que
antes
había visto.
(de Retrato de mujer azul, civiles iletrados, 1998)